La adoración es un concepto y práctica fundamental dentro de la doctrina y vida cristianas. La adoración es la prioridad suprema de la vida. Dios creó al hombre para que lo adorara por lo que Él es y por lo que Él hace. Adorar es acercarse a Dios, es estar en Su presencia, es silenciar el alma ante el Creador de todas las cosas. A través de la adoración permitimos que Dios nos llene con su gracia. No hay experiencia humana más sublime que adorar a Dios. Dios siempre nos invita a adorarlo. Él busca verdaderos adoradores, que lo adoren en espíritu y en verdad. El ministro cristiano tiene la importante tarea de guiar al creyente a expresar su adoración en una manera más profunda, inclusive hasta el punto de tocar el corazón de Dios. El cristianismo es una religión que puede expresarse en cualquier vertiente cultural. Por eso, la verdadera adoración debe tener muy en cuenta el contexto particular del adorador. De esa manera, permitiremos que el cristiano exprese espontánea, propia y profundamente, de acuerdo al lenguaje de su corazón y cultura, la forme de acercarse a Dios para adorarlo. Por lo tanto, conocer los fundamentos bíblicos y teológicos de la adoración, así como la forma de canalizar la misma en una cultura determinada, desde la perspectiva wesleyana, es urgente en la preparación del ministro de Dios y en la práctica litúrgica de la iglesia. En fin, este curso ayudará al estudiante a analizar los principios bíblicos, teológicos (wesleyanos) de la adoración, resaltando su relevancia en la dinámica de la iglesia y cómo expresarla dentro de su propia cultura.
Un video que analiza la situación de la Música Cristiana en la actualidad. Los estudiantes podrán acceder al video y presentar un análisis del mismo siguiendo las instrucciones del docente. Tarea para el primer día.